La Guerra del Atlántico Sur en el Litoral Marítimo Patagónico

Oscar Nicoletti 15 Mayo de 2022

En la mayoría de los Libros de Tácticas y Estrategias Militares, sean desde los antiguos y hasta los más modernos tratados, los esquemas de Maniobras Operacionales se consideran en función de sus unidades esenciales: Bases, Lineas Defensivas, Lineas Ofensivas y Objetivos.

Ya sea Napoleón y sus manuscritos sobre lineas de operaciones, Sun Tzu en El Arte de la Guerra o Federico II de Prusia y hasta los libros más contemporáneos como el del General Karl Von Clausewitz en De la Guerra, indican la importancia de comprender que la fuerza de combate “siempre ha de ser considerada juntamente con su base, formando un todo” (Von Clausewitz, 1832).

Es necesario comprender que una Fuerza de Combate no puede ser dividida para asignarle un rango distintivo a una unidad sobre otra, solo se cumplen funciones distintas dentro de una Maniobra Operacional.

Sin embargo, en Argentina, las Bases Militares del Litoral Marítimo Patagónico fueron excluidas de ser consideradas dentro de la jurisdicción de Guerra del Atlántico Sur. No se las reconocen como Unidades Militares Bélicas, o al menos dejaron de ser reconocidas como tal a partir de la reglamentación de una Ley del Congreso en 1988, aún a pesar de que desde estas Bases se formaron las Maniobras Operacionales que mayor destrucción le ocasionaron a la Flota Británica.

La exclusión de las Bases Militares del Litoral Marítimo Patagónico como parte de la Guerra del Atlántico Sur tiene sus consecuencias:

Sociales, un numeroso movimiento en reclamo por la devolución de los derechos de veteranía y por el reconocimiento como combatientes de los Soldados excluidos a partir de 1988;

Históricas, la tergiversación del discurso sobre los hechos está llevando a la sociedad argentina a mal interpretar una Guerra que en su conjunto ocurrió en todo el Atlántico Sur, minimizando las consecuencias de la pérdida a sólo las Islas Malvinas, cuando en realidad significa también la perdida del acceso a un vasto territorio marítimo e insular, impidiendo la explotación de su riqueza, el desarrollo de nuevas fuentes económicas y negando a las futuras generaciones de argentinas y argentinos la comprensión real de la problemática del Atlántico Sur.

La inclusión de las Bases Militares del Litoral Marítimo Patagónico dentro del territorio de Guerra significa reconocer como Combatientes a sus 9.500 Soldados, aceptando la incursión del enemigo británico en las Costas Patagónicas, y permitiendo la revisión de la Historia Oficial que contemple integralmente el problema del Atlántico Sur.

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